Padre Santo,
Tú has querido elegir
a estos hijos tuyos
y les has dado a conocer la fe
en tu Hijo Jesucristo.
Por medio de la Iglesia,
envía sobre ellos
la fuerza de tu Espíritu
para que caminen siempre
a la luz de esta fe que han recibido
y puedan gozar un día, cara a cara,
de lo que aquí han creído
con corazón limpio.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
Amén.